CONSTITUCIÓN ECOLÓGICA MUNDIAL - EL ECO COMÚN (2DA PUBLICACIÓN)
CONSTITUCIÓN ECOLÓGICA MUNDIAL, EL ECO COMUN El medio ambiente influye sobre los seres vivos, aun desde los unicelulares, provocando efectos que dependen de cada individuo, su especie, y el modo de aprovechar esos elementos que nos ofrece la naturaleza para la subsistencia. Ningún país del planeta tierra puede subsistir sin aire, agua, el sol, la luna y, obviamente los alimentos, esta condición no puede ser aplicada a unos países y otros no, por ejemplo los desarrolados y los no desarrollados, todos vivimos en territorios, demarcados políticamente con unos limites por demás absurdos, y todos necesitamos los mismos bienes de la naturaleza para subsistir. A partir del reconocimiento de los derechos humanos, del contrato social al cual, ya desde nuestro nacimiento estamos sujetos, es oportuno crear una Constitución Ecológica Mundial la cual nos permita exigir a los gobernantes de turno nuestros derechos como miembros de un sistema, inevitablemente imprescindible para nuestra supervive